Amaia Romero, ganadora de Operación Triunfo 2017, no daba crédito cuando visitó el camerino que habían asignado a los concursantes varones del programa para el concierto que esta noche darán en el Palau Sant Jordi de Barcelona.
Por esa razón, Ricky, uno de sus compañeros, le dio la oportunidad de mostrar en público su quejar por lo que acababa de ver.
"Amaia, reivindica con tu chocolate aquí en la barbilla, ¿qué está pasando Amaia?", preguntó Ricky.
"Nada, que los chicos en su camerino tienen tele con Play Station y nosotras no tenemos una mierda", respondió la navarra.
"¿Y vosotras que tenéis?", cuestionó Ricky.
"Espejo", contestó Amaia.
Una discriminación que ha encendido las iras en Twitter, donde el vídeo con su queja acumula ya más de mil retuits.
Muy bien, Amaia reivindicando los mismos derechos para las mujeres!
Hasta Play Station España ha contestado a la queja de Amaia: "Con una Play es suficiente para disfrutar todos juntos. ¡A ver quién es capaz de ganar a Amaia a una batalla en Singstar!".
Úrsula Corberó ha compartido este viernes en su perfil de Instagram una de las fotos más exitosas de las que ha publicado en su perfil de Instagram, donde cuenta con más de 2 millones de seguidores.
La imagen que ha causado sensación entre sus seguidores es en blanco y negro y la muestra a ella junto a varios de sus compañeros de reparto en la serie La casa de papel: Alba Flores, Miguel Herrán y Jaime Menéndez.
Interpretan respectivamente a Tokio, Nairobi, Río y Denver en la ficción, que se estrenó en Antena 3 y que ahora puede verse en Netflix. La serie se ha convertido en un fenómeno internacional gracias a su presencia en la plataforma, donde está batiendo récords como la serie más "maratoneada".
La publicación de Úrsula Corberó junto a sus compañeros va acompañada del texto "Bebés" y ha logrado más de un cuarto de millón de 'me gusta' y miles de comentarios en apenas unos minutos.
Vergonzosa escena la que se ha vivido este miércoles en Myrtle Beach (Carolina del Sur, EEUU), donde un cliente fue expulsado de un McDonald's después de intentar comprar un menú para un mendigo.
Yossi Gallo vio al hombre pidiendo limosna junto al establecimiento de comida rápida y decidió tener un bonito gesto con él.
Así que se acercó y le preguntó: "¿Tiene hambre?". "Sí", contestó el mendigo, a quien Gallo acompañó al establecimiento y le dijo que esperara sentado.
Sin embargo, lo que no imaginaba es que una de las empleadas que atendía en la caja le negara el servicio. "No vas a comprar comida", le espetó al mendigo.
Los responsables del establecimiento llamaron a la Policía y a los pocos minutos allí se presentaron dos agentes, un hombre y una mujer.
Algo que enfureció a Gallo, quien comenzó a grabar lo que estaba pasando. "No me ha pedido dinero, no me ha pedido comida, yo se la he comprado. Dais asco", gritaba el joven mientras captaba con su móvil la escena.
"Señor, cálmese", le pidió uno de los policías. "Yo hablo así, si el agente tiene algún problema, puede arrestarme", aseguraba.
"No me ha pedido comida, le vi al otro lado de la calle, vine aquí y le compré comida", explicaba.
En un momento dado, el encargado del establecimiento aparece en la escena y le pide que se vaya, a lo que los agentes reaccionan dándole la razón y pidiendo a Gallo que abandone el local.
"¿Me van a devolver el dinero por la comida que no me he comido?", preguntó Gallo. "No soy la Corte Civil", respondía la agente.
Al final del vídeo, Gallo sale del establecimiento y se dirige al mendigo, que hacía tiempo había abandonado el lugar. "Vámonos a otro lado a por comida".
Siempre se ha dicho que el objetivo de cualquier deportista debe ser batir los récords de los que le han precedido y ganar, ganar siempre. Pero Jordan Bohannon, jugador del equipo de baloncesto de la universidad de Iowa, pensó que la humanidad está antes que los récords. Por eso, cuando tuvo la oportunidad de superar el récord histórico de anotación de tiros libres de su equipo en la NCAA (la segunda división de la NBA), prefirió fallar. Era su tiro 35, y lo echó fuera.
Fue su manera de mostrar respeto al jugador que ostentaba ese récord, Chris Street, un antiguo jugador del club que falleció en 1993 en un accidente de tráfico, con sólo 21 años. El gesto de Bohannon ha dado la vuelta al mundo y da esperanza a quienes creen que el deporte es una escuela de valores y no el lugar en el que entrenar la competitividad a cualquier precio.
Ha ocurrido en la NCAA: Jordan Bohannon llevaba 34 TL anotados de forma consecutiva. Con uno más, rompía el récord de su universidad. Lo falló a posta, ya que el récord pertenece a Chris Street, que falleció a los 21 años en un accidente en 1993. Ahora ambos comparten récord👏👏 pic.twitter.com/SL0nD7L6Fk
"El récord merece seguir llevando su nombre", dijo el jugador tras fallar adrede el tiro libre que le habría hecho superar a Street. Los padres de este estaban en la pista cuando Bohannon decidió homenajear a su hijo, y fueron los primeros en abrazarlo cuando el partido terminó. Con victoria de Iowa, por cierto.
Bohannon ha relatado a varios medios estadounidenses que se ha acercado mucho a la familia de Street en los últimos años y ellos han agradecido el gesto del jugador.
Las elecciones del 4 de marzo en Italia difícilmente terminarán con un partido o una coalición con una mayoría necesaria para gobernar. Un grupo de líderes cansados, una campaña electoral de todo menos excitante —sin enfrentamiento y sin grandes mítines en las plazas italianas—, una opinión pública aturdida —los indecisos representan alrededor del 30%— y una ley electoral controvertida y poco eficaz son los principales elementos de un panorama que es de todo menos fácil de descifrar. Y los resultados son cada vez más inciertos.
Los últimos sondeos publicados, a dos semanas del voto, muestran una situación bloqueada. La coalición de centro derecha, formada por Forza Italia (Silvio Berlusconi), Lega Nord (Matteo Salvini) y Fratelli d'Italia (Giorgia Meloni), alcanzaría un dato de alrededor del 34-38%, lo que les daría ventaja pero no la suficiente para obtener la mayoría absoluta de escaños. El Movimiento 5 estrellas del líder en ascenso Luigi Di Maio sería el partido con más apoyo, pero no alcanzaría más de un 28-30%.
Por su parte, el Partido Democrático de Matteo Renzi pagaría la escasa aprobación del ex primer ministro, moviéndose entre el 20 y el 24%. En conjunto, la coalición de centro izquierda podría beneficiarse del resultado de Emma Bonino, con su lista +Europa. Aún así, los posibles apoyos a los miembros de la exponente exradical podrían dañar al Pd que ya está obstruido por la lista de izquierdas de Liberi e Uguali, que unifica a muchos exdemócratas enemistados con Renzi y que se estima que obtendrá alrededor de un 5%.
En resumen, el panorama tras las votaciones en Italia es de todo menos claro. Lo único que parece seguro es que el verdadero juego comenzará el día posterior a las elecciones del 4 de marzo, cuando por procedimiento institucional el presidente de la República, Sergio Mattarela, iniciará las consultas con los jefes de los grupos parlamentarios con el fin de señalar a un futuro primer ministro que intente formar gobierno. También hay confusión en este aspecto, ya que no está claro si esa figura será el líder del partido más votado (probablemente el M5S de Di Maio) o un líder del partido con mayoría dentro de la coalición que resulte vencedora. Si lo consigue la de centro derecha ,el cargo recaería en Antonio Tajani, puesto que Berlusconi se encuentra inhabilitado por fraude fiscal hasta 2019 . El actual presidente del Parlamento Europeo ha aceptado este viernes ser el candidato de Forza Italia.
Llegados a ese punto, los italianos se encontrarían con estos cinco hipotéticos escenarios, ordenados de menos a más probable.
El gobierno de "todos contra Berlusconi"
Centrado en la ley sobre el conflicto de intereses, podría generar una mayoría de M5S, Pd y Liberi e Uguali. Es una solución muy remota ya que el sentimiento antiBerlusconi ya no se respira en Italia y, además, parece casi imposible resolver las diferencias entre demócratas, 5 Estrellas y parte de la izquierda italiana.
Un gobierno "soberanista" Lega Nord-Movimiento 5 estrellas
En el pasado, no han faltado las convergencias entre Matteo Salvini y Luigi Di Maio: ambos acumulan tendencias populistas, son antieuropeos (más radicales en un principio, más biselados a día de hoy) y antisistema. El líder del M5s ya ha anunciado que, tras el resultado electoral, hará una petición pública para buscar convergencias con su programa. Sería la solución más temida por Europa, los mercados y las élites italianas.
Un gobierno de grandes acuerdos
Se formaría con la coalición de centro izquierda (Pd,+Europa,Civica popolare e Insieme) y Forza Italia, que se "liberaría" de sus aliados más "extremos": Salvini y Meloni. Sería una nueva edición del gobierno de Letta nacido a comienzos de esta legislatura, en 2013, y que terminó con el ascenso de Renzi en 2014. Probablemente a esta situación se refería el primer ministro en funciones Paolo Gentiloni, cuando anunció a Angela Merkel "un gobierno estable", fundado sobre el pilar de la coalición de centro-izquierda.
Un gobierno de centro derecha
Sería posible si la coalición formada por Forza Italia, Lega Nord, Fratelli d'Italia y Noi con l'Italia consigue llegar al tan ansiado 40% proporcional. Eso sí, con la incógnita de cual de las dos fuerzas mayoritarias —Forza Italia y Lega— conseguirá más votos y, como consecuencia, un líder. Un gobierno que parece unido sobre el papel pero que en realidad es muy poco homogéneo. Son muchas las diferencias básicas de estos aliados, desde la política económica hasta su posicionamiento respecto a Europa, tan distintas que tan distintas que sólo han participado juntos en un acto de cierre de campaña este jueves.
Un gobierno del presidente
Tendría la única función de cambiar la ley electoral para luego volver a las urnas. Muy popular entre los analistas, que lo han planteado de distintas formas posibles, sería un gobierno sostenido por una amplia mayoría con pocos objetivos y con una vida de pocos meses, el tiempo necesario para que el Parlamento haga una reforma del sistema electoral para garantizar la gobernabilidad en la siguiente vuelta.
La gobernabilidad es la verdadera quimera de estas elecciones. No la protección de otro animal mágico que, gracias a la volatilidad de los electores, ha aparecido en la escena mundial justo en el momento del voto: ese cisne negro de la política que podría revertir la situación y llevar a Italia a tierras desconocidas.
Este artículo ha sido escrito por el equipo de la edición italiana de HuffPost y traducido del italiano por Uxía Prieto.
Un estudiante de la Universidad de Oviedo está arrasando en redes sociales por la modificación humorística que ha llevado a cabo en la página web de la institución.
Alguien ha publicado en Twitter el resultado de estas modificaciones y las fotos se han convertido en virales, con más de 4.000 retuits.
Seáis quienes seáis los genios que habéis hecho estas cosas, toda la Universidad de Oviedo os está muy agradecida. Qué manera de llorar de la risa. pic.twitter.com/WejyWKeizJ
En la información sobre un Máster, por ejemplo, en el apartado sobre el precio, el estudiante anónimo escribió un explícito "Dame todo tu dinero", que refleja muy bien lo que muchos jóvenes sienten a la hora de enfrentarse a la matrícula en unos estudios superiores.
Otro ejemplo: el estudiante ha aprovechado una de las típicas fotos en las que varios profesores posan en un acto para escribir titulares como este: "Cinco señores se reúnen y se sacan una foto, sin saber muy bien por qué". No contento con eso, ha añadido un subtítulo: "En la imagen se observa que tres de los cinco participantes parecen confusos, e incluso se aprecia como el del bigote gracioso pregunta al de su derecha por el fin de la reunión".
Lo que ha hecho este estudiante no ha sido un hackeo, sino algo mucho más de andar por casa: utilizar una herramienta del navegador de su ordenador para cambiar el contenido de la página. Esas modificaciones sólo son vistas por quien las realiza, pero basta hacer una captura de pantalla para tratar de hacerlas pasar por modificaciones reales.
La versión de la página que vieron la mayoría de sus usuarios no mostraba estos cambios, pero aquellos que la vieron... se echaron unas risas.
Qué va, solo gente que se aburría y cambió un par de cosas, pero al recargar página volvía todo a la normalidad. A los que somos de UniOvi nos hizo gracia lo que iba haciendo la gente, sin más
El padre de Danny tenía motivos de sobra para estar enfurecido con su hijo. Mientras hacía la colada, encontró en los pantalones de su retoño algo que no esperaba: marihuana.
Lejos de esperar a que Danny regresara del colegio, decidió grabarse con el móvil y enviarle un mensaje.
"Hey Danny, ¿cómo estás? Quiero hablarle a mi hijo Danny, que ahora está en el colegio, haciendo que me sienta orgulloso", comenzó el mensaje.
"Danny, estoy haciendo tu colada. Tu colada, tío. Lo que me gusta de la colada es que si encuentro algo que no me gusta, lo tiro", prosiguió el padre, cuyo tono de voz iba aumentando en intensidad.
"No me hagas encontrar tu mierda en mi casa o esto va a pasar", dice mientras agarra un frasco negro del que cae al retrete un cogollo de marihuana.
"¿Lo pillas?", añade mientras tira de la cadena. "La próxima vez hazte cargo de tu mierda, no quiero verla en mi casa, ¿está claro, tío? Te quiero y esto lo hago por tu bien", agrega.
Sin embargo, la droga no termina de irse por el desagüe. "Guau, no quiere irse. Necio. Como tú", dice el hombre.
"Esto te lo puedes quedar, te lo voy a devolver, así no tienes que pagarlo", explica el padre, que insiste en recordarle a su hijo que no quiere su "mierda" en su casa. "Si la encuentro, la tiraré, como tu mechero. Se fue, papá, no más".
"Te quiero. Hago esto porque te quiero. ¿Sin resentimientos?", concluye el vídeo.
El vídeo, publicado en YouTube, lleva ya más de 100.000 visualizaciones en menos de 24 horas.
Teresa Rodríguez ha recurrido a Instagram para compartir con sus seguidores una queja tras ver su aspecto en televisión.
La líder de Podemos en Andalucía ha publicado en su perfil una imagen de sí misma, rodeada de micrófonos, respondiendo a las preguntas de los medios de comunicación.
Lejos de acompañar la instantánea de un comentario con carga política, Rodríguez ha sorprendido a todos por la naturalidad con la que se ha quejado de su aspecto en televisión: "Tú te puede peiná antes de salir de casa, pero vamos, que es pa na. Luego en la tele sale como si vinieras de limpiar el cuarto baño".
Esas palabras han provocado risas entre sus seguidores y también muchos comentarios en los que intentan hacerle ver que no hay ningún problema con su aspecto.
Jajaja lo tuyo es belleza natural andaluzajavilonger
Grande!! Jajajjaatowandarebels
Qué arte tienes! ¿Andaluz quizás? 🙈💜ana3.14tagorina
ajajajajajaja la mejor eres Teresa pordio!! Tu eres guapa siemprepizarro_fatiJ
Qué arte!!! Tú te lo puedes permitir, miarma!!! Hasta despeiná estás guapa!!!daniel_banos_
Estás preciosa! . Ole tuafritxu
Tú estás estupendacarmennievescobo
Es igual peinada o sin peinar, lo importante es tener la cabeza bien amueblada para hacerse entender hasta por el más torpe.patxi231
Sin medias y bajo un enorme paraguas para resguardarse de la insistente lluvia. Así apareció la reina Letizia esta mañana en la capital gallega para asistir a la presentación de Digitalizadas en el Hostal de los Reyes Católicos en Santiago de Compostela, acompañada del Presidente de la Xunta de Galicia Alberto Núñez Feijóo.
Pese al mal tiempo Letizia optó por un vestido drapeado de manga corta y falda midi en tono azul. El diseño contaba con bordados que hacían un efecto tableado y que destacaban en la parte superior del vestido, trazando unas líneas geométricas. La reina completó su estilismo con un abrigo negro de corte recto, solapas anchas y anudado en la cintura.
Este diseño está muy de moda actualmente gracias al llamado efecto Meghan Markle, ya que la actriz es una fiel seguidora de esta silueta y la ha lucido en múltiples ocasiones, como el día en el que anunció su compromiso con el Príncipe Harry.
Letizia repitió sus habituales stilettos negros de Prada y eligió unos pendientes de Elena Carrera en forma de mariposa. La reina optó por dejar su melena suelta y un maquillaje natural para este acto.
En Sopa de ganso, de los hermanos Marx, la realidad no tenía cabida en la República Democrática de Freedonia. No había cordura en la historia, ni en los gags, ni en los personajes. Y lo mismo ocurre en la superproducción que Carles Puigdemont interpreta desde Waterlooo empeñado en la construcción de una imaginaria República catalana.
En Cataluña pasan cosas, que diría Rajoy, pero ninguna parece muy normal en la normalidad que el independentismo pretende dibujar para el futuro. Resulta que un señor huido de la justicia española sale en un vídeo por YouTube y cuenta que ha decidido renunciar a la Presidencia de la Generalitat, y compramos el mensaje sin reparar en que uno renuncia a algo que tiene o le corresponde y que por muy machacón que resulte el relato del legitimismo, Puigemont ni tiene ni podrá ya nunca ocupar el sillón del Palau.
Luego nos cuenta que va a proceder a los trámites necesarios para designar president a Jordi Sánchez, un ilustre preso de Soto del Real, y le damos categoría de cinco columnas a cuerpo 35 en todos los diarios como si eso fuera posible. Aún en el caso de que el juez Llarena, que no parece, decidiera concederle permiso penitenciario para acudir a la sesión de investidura ya me contarán cómo se puede desde la prisión gobernar una comunidad autónoma.
Junqueras pide paso
Ah no, perdón, que Sánchez es el plan B, pero aún hay un plan C en la recámara que pasa por Turull, que no está en la cárcel pero sí acumula unas cuantas causas pendientes con la Justicia por parecidos delitos a los que se les imputan a Puigdemont, Sánchez y el resto de la cúpula independentista que cuando menos, y con una generosa interpretación de la ley, serán inhabilitados más pronto que tarde. Si esto va de restitución de un Govern depuesto al albur del 155, ERC entiende que debe ser Junqueras, y no Sánchez ni Turull, quien ocupe la presidencia.
Todo muy normal en esta "Catalonia" independentista en la que el sentido común brilla por su ausencia y en la que, de no ser por la relevancia política, económica y social de sus andanzas, la historia no daría para más que una gran escena cómica con pretensión de hacer reír. Una chiflada y surrealista obra en la que se proclaman porque sí dos capitales (Barcelona y Waterloo) para Cataluña con tal de que el exilio de Puigdemont tenga categoría política y, se visualice, según cuenta, el papel que desempeñará Bélgica en esta ópera bufa.
Prolongar el pulso al Estado
¡Acabáramos! Que el ex molt honorable se aparta, pero quiere seguir y presidir un Consejo de la República con un festival de diputados y alcaldes independentistas yendo y viniendo a Waterloo a no se sabe qué tipo de peregrinaje en favor de una Cataluña independiente como sí ésta no hubiera recibido ya el portazo de Europa, la implacable respuesta de Estado de Derecho, el ninguneo de las empresas y la carcajada de medio mundo.
El fingimiento no esconde más que la profundísima fractura del independentismo, prolonga el pulso al Estado y alimenta el relato de la persecución política, pero ni resuelve el problema de Cataluña ni impide que en España también pasen cosas, y tampoco muy normales en la normalidad que busca el Gobierno de la derecha.
Porque si tan anormales como surrealistas han sido los pasos que ha dado esta semana el independentismo para seguir instalado en su bucle imaginario, no menos lo han sido algunas de las declaraciones y movimientos de La Moncloa, porque que un Gobierno avance que el juez no dará permiso a Sánchez para ser investido resulta de todo menos normal en una democracia que se precie de serlo. E ídem que la Fiscalía emita una nota preventiva sobre los posibles delitos en que puede incurrir un Parlamento pasando por alto que son las personas y no las instituciones quienes delinquen. Lo de que el Gobierno se plantee recurrir una resolución política sin efecto jurídico alguno da la risa teniendo en cuenta lo que ha teorizado al respecto y contra ello durante lustros
Rajoy sale de la guarida
Esto ha sido España en una semana en que Mariano Rajoy ha decidido salir de su guarida espoleado por el pánico que un desplome electoral ha empezado a causar entre los suyos. Y no sólo por las encuestas ajenas, porque también las propias les anuncian el fin de su primacía en favor de Ciudadanos en un gran número de capitales de provincias.
El presidente se ha paseado por el plató de El Programa de AR y ha anunciado que en diez o doce días irá al Parlamento a hablar del futuro de las pensiones. Para entonces, igual los jubilados ya han acampado en las calles y las plazas porque la protesta no tiene pinta de amainar ni la oposición de soltar un asunto convertido ya en arma electoral. No en vano, ocho millones y medio de votos están en juego y todos quieren pescar del mismo caladero.
Claro que la sensatez tampoco se ha impuesto en la izquierda para abordar este asunto, ya que PSOE y Podemos andan más pendientes de llegar el primero al registro del Congreso y a la cabeza de las concentraciones que de sentarse a hablar en serio del presente y del futuro de las pensiones. Y mientras Iglesias empieza a ceder espacio a Errejón en la protesta y en las televisiones, Sánchez regresa a toda prisa de su gira por los diarios de provincias para reclamar el que sus críticos internos han ocupado durante su ausencia en la escena nacional tras varios meses de silencio. No hay manera de que haya paz en el cementerio socialista.
Durante el reportaje, su conductor, el periodista Jordi Évole, le hace entrega a Feijóo de un ejemplar del libro, que logró récord de ventas en Internet desde su secuestro, impuesto por una jueza a petición del exalcalde de O Grove, José Alfredo Bea Gondar, que se querelló contra Carretero.
En otro momento de la entrevista, Évole le pregunta a Feijóo si sigue alguna serie. "House of Cards, Juego de Tronos... Narcos", inquiere el periodista.
"Tengo que reconocer que no la he visto", responde el político del PP sobre la serie Narcos. "¿No ha visto Narcos?", insiste Évole. "No", responde Feijóo.
Ahí es cuando el periodista lanza su chascarrillo, que hace reír al presidente gallego: "Bueno, narcos supongo que sí que ha visto, pero me refiero a la serie".
-Sr. Feijóo, ¿no ha visto "Narcos"?
-No
-Bueno, narcos seguro que ha visto. Me refiero a la serie.
DOMINGO SALVADOSpic.twitter.com/PX4q3Z6rOe
El presidente Donald Trump convocó a los legisladores para algo poco habitual en la política actual: una reunión importante, que no entraba en los planes, para debatir sobre un polémico problema que ha provocado que el presidente rompiera ante las cámaras una tradición ortodoxa del partido republicano.
En el evento televisado del pasado miércoles, Trump adoptó un tono moderado y animó a un grupo de republicanos y demócratas a que abordaran lo antes posible la reforma integral de la ley de armas. Reprendió a los republicanos de la sala por su poca disposición a oponerse a la Asociación Nacional del Rifle (NRA en inglés), el grupo de presión más importante del país a favor de las armas. Incluso mostró su apoyo a ideas como la verificación universal de antecedentes y la subida de la edad mínima para comprar un arma de fuego.
Este cambio de postura de Trump al centro entre ambos extremos, que se produce dos semanas después del trágico tiroteo en el instituto de Florida, suscitó sonrisas y gestos de victoria entre varios de los demócratas que estaban presentes en la reunión. Incluso a los republicanos los pilló por sorpresa.
"Me pareció fascinante y surrealista", declaró posteriormente John Cornyn, senador republicano por Texas.
Sin embargo, por positiva que fuera la reunión, los demócratas advierten que hay motivos para mantener el escepticismo. La actitud de Trump, por ejemplo, fue prácticamente idéntica a la que mantuvo en una reunión en enero con los legisladores para debatir la forma de abordar el asunto de los dreamerso soñadores, los jóvenes sin documentación que llegaron a Estados Unidos siendo niños gracias al programa DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia). En este tiempo ha recurrido a tópicos, pero ha acabado dando la espalda a un acuerdo entre ambos partidos.
"Ha sido como ver una repetición de la reunión sobre inmigración. Esperemos que el desenlace sea diferente", comentó un ayudante de uno de los senadores demócratas en declaraciones a la edición estadounidense del HuffPost.
Los partidarios de unas leyes más estrictas de control de armas están deseando que Trump ponga en marcha algunas medidas a las que los más ortodoxos normalmente se opondrían. Esperan aprovechar la volubilidad del presidente en materia de política y la rápida reacción del Congreso tras el tiroteo masivo de Florida que terminó con 17 fallecidos.
El debate de las armas ha sido como una repetición del de la inmigración. Esperemos que el desenlace sea diferente.
Cuando la senadora demócrata por Minnesota Amy Klobuchar sugirió ofrecer una mayor protección contra la violencia con armas para las víctimas de violencia doméstica, Trump estuvo de acuerdo. Para sorpresa de muchos de los miembros de su partido, Trump rechazó la idea de incluir medidas defendidas por los republicanos para permitir la portación oculta, un permiso para poder llevar encima armas de un estado a otro si se hace de forma no visible. Dicho de forma general, el mensaje que dio Trump es que quería convertir "una gran disposición legislativa" en ley, aunque no especificó cómo iba a ser.
La incógnita es si este entusiasta Trump de la reunión del miércoles seguirá siendo el mismo en los tiempos venideros. El debate sobre inmigración anticipa muchos motivos para seguir siendo escépticos.
"Todo el mundo se me está acercando para decirme: 'Acabamos de pasar por lo mismo que pasamos en la reunión del DACA", confesó el senador demócrata por Illinois Dick Durbin en declaraciones al HuffPost.
"¿Por qué habríamos de creer [al presidente]?", añadió.
Durante la reunión televisada del pasado mes de enero, Trump expuso cuatro medidas básicas en materia de inmigración para elaborar un proyecto de ley para ayudar a los 700.000 soñadores a los que puso en riesgo de deportación al cancelar el plan DACA. Sin embargo, señaló que estaba dispuesto a ser flexible con lo que decidiera elaborar el Congreso.
¿Por qué habríamos de creer al presidente?
"No voy a decir 'yo quiero esto' o 'yo quiero lo otro'. Lo voy a firmar", declaró Trump entonces.
No tardó en venirse abajo todo eso. Dos días más tarde, Trump mantuvo una reunión fuera de cámaras con varios legisladores en la que el senador Dick Durbin y Lindsey Graham, senador republicano por Carolina del Sur, hicieron una propuesta bipartidista para concederle la legalidad a los soñadores, reforzar la seguridad en las fronteras y aplicar ciertos ajustes al sistema de inmigración. Trump rechazó la propuesta y pronunció sus presuntas e infames palabras sobre que Haití, El Salvador y algunos países africanos son unos "agujeros de mierda". (Él lo niega, pese a que Dick Durbin lo ha confirmado públicamente).
A partir de entonces, Lindsey Graham empezó a hablar del "Trump del martes" y el "Trump del jueves", en referencia al repentino cambio de postura del presidente en cuestión de días.
Posteriormente, Trump endureció su postura con respecto a lo que estaba dispuesto a aceptar para ayudar a los soñadores e hizo especial énfasis en que se incluyeran sus exigencias exactas si querían aplicar cambios importantes al sistema de inmigración legal. Su administración comenzó a mantener llamadas telefónicas desde la Casa Blanca con los periodistas para arremeter contra las propuestas bipartidistas. El Departamento de Seguridad Nacional llegó a emitir un comunicado que acusaba a los senadores de apoyar medidas políticas que podrían en peligro las vidas de los estadounidenses.
Cuando el Senado celebró la votación sobre inmigración, ninguna propuesta consiguió los 60 votos necesarios para la aprobación. La propuesta bipartidista presentada por los senadores Mike Rounds (republicano por Dakota del Sur) y Angus King (candidato independiente por Maine) recibió 54 votos, mientras que la propuesta apoyada por Trump solo obtuvo 39.
Pese a eso, Amy Klobuchar declaró tras la última reunión que se mantenía moderadamente optimista con las probabilidades de conseguir algún tipo de reforma de la ley de armas, ya que Trump parecía haber explicado su postura de forma algo más clara.
"No sé hasta qué punto podría haber sido más transparente", admitió la senadora.
Chris Murphy, senador demócrata por Connecticut y uno de los mayores defensores del control de armas, opinó que solo el tiempo dirá si el presidente hablaba en serio a la hora de abordar el problema.
"Si viene aquí [al Capitolio] y manda aquí a su gente a apoyar las verificaciones universales de antecedentes, aprobarán la medida", aseguró Chris Murphy.
"Voy a vigilar de cerca los movimientos de la Casa Blanca en los próximos días. La Casa Blanca ahora puede lanzar una campaña para lograr que se apruebe la medida de las verificaciones universales de antecedentes, como prometió el presidente, o puede quedarse sin hacer nada", resumió.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.
Mi abuelo que era un hombre del renacimiento, tremendamente sensible y un apasionado de la poesía, me dijo un día una bella y delicada frase que nunca olvidaré: "Muchacho, en esta vida solo hay dos clases de personas: los cagones y los descerebraos".
Según esta elaborada aunque poco contrastada teoría, "los cagones" serían todas aquellas personas que ven la vida como una carrera de fondo y por lo tanto parecen pasar por este mundo con el freno de mano puesto. Es gente a la que no le gusta arriesgar y se conforman con lograr un bienestar vital moderado siempre y cuando este sea duradero en el tiempo. De ahí que estos sujetos suelan invertir todos sus esfuerzos y dinero en valores a largo plazo como la familia, el amor, el trabajo, el Atlético de Madrid... Los seguidores de esta escuela filosófica son muy fáciles de reconocer ya que se visten de arriba abajo del Decathlon, beben Aquarius y nunca pero nunca se comen el borde de las pizzas.
Del otro lado estarían "los descerebraos". Esta corriente de pensamiento englobaría a todos aquellos que viven por y para el placer del ahora. Este planteamiento existencial se debe en gran medida a que creen que la muerte es algo que les va a sorprender más pronto que tarde, así que para lo que me queda en el convento me cago dentro. Pese a ser animales libres, vitales y díscolos, suelen presentar importantes cuadros de arrepentimiento agudo ya que siempre se dejan llevar por aquello que les pide el cuerpo sin pensar en las consecuencias. Estos sujetos son muy fáciles de reconocer ya que llevan un brazo entero tatuado con carpas japonesas, el cual se hicieron para tapar otro tatuaje tribal que se hicieron con 20 años, que a su vez se lo hicieron para borrar el nombre de su ex mujer/hombre de su vida.
¿Y por qué os cuento todo esto?. Pues porque hoy quiero hablaros del personaje que en mi humilde opinión fue el mayor descerebrado del siglo XX, o lo que es lo mismo, el tío más disfrutónall around the world. No amigas, no estoy hablando de Hugh Hefner, ni de Jesús Gil y Gil, sino de un señorín de bigote nacido en 1946 en la isla de Zanzíbar y que el 5 de septiembre de 1987 celebró su 41 cumpleaños en Ibiza. La celebración fue un auténtico desmadre, hasta el punto de que a día de hoy se sigue considerando aquella fiesta como la más loca de la historia de la isla... Y decir eso en la isla de las fiestas te aseguro que no es moco de pavo.
¿Qué de quién estoy hablando?. Pues sintiéndolo mucho tendrás que esperar hasta la semana que viene para saberlo, pero te daré una pista: tenía la boca llena de dientes y ostenta el Record Guinness de "la persona con el pelo del pecho más lozano y rectilíneo desde que hay mediciones".
Me parece que, generalmente depende en cual de estas dos categorías es que cae tu producto:
Tienes un producto completamente local que sólo vendes a tus conocidos sin una estructura específica
Tienes un producto que a pesar ser vendido de forma local cuenta con una estructura clara y un lugar específico como punto de venta, ya sea físico o digital.
Si entras dentro de la primera categoría y no estás planeando generar un estructura específica para el producto que estás vendiendo lo mejor es hacerlo por "Share of Mouth", yo recomendaría invertir en tarjetas de contacto que puedas dar a quienes ya han comprado tu producto para que puedan compartir tus datos con otras personas que ellos conozcan que puedan estar interesadas.
Si tu producto entra en la segunda categoría hay mucho más que puedes hacer, en especial si tienes presencia digital (sitio web) más allá de si también tienes locaciones físicas. Si no tienes presencia en redes sociales, aunque tengas puntos de venta física debes considerar crear campañas de publicidad digital para el producto[1] además que ya con una página de contacto en la web puedes tomar varias acciones para impulsar las ventas en tu página [2] .
En general, una estrategia de publicidad en Google AdWords y Facebook suelen ser las mejores opciones pues con AdWords serás capaz de aparecer a tu púbico potencial justo cuando esta buscando servicios como los tuyos y en Facebook porque te permite llegar a donde el mayor porcentaje del mercado, en general, pasa la mayor parte del tiempo: En redes sociales y Facebook es la mejor opción abarcando cerca del 75% del total de usuarios de internet, esto duplica los usuarios de Instagram (32%) y triplica los de Twitter (24%).
Esta preguntaapareció originalmente en Quora, un lugar para adquirir y compartir conocimiento, capacitando a la gente a aprender unos de otros y comprender mejor el mundo. Puedes seguir a Quora en Twitter y Facebook. Más preguntas:
Me reconozco, antes que nada, polizón en la maravillosa barca de la Nao d´amores, uno de los grupos teatrales más valientes e inteligentes que hay en nuestra escena contemporánea. Como ya tuviéramos ocasión de recordar en este mismo blog a raíz del estreno de su Triunfo de amor de Juan del Enzina, la Nao d´amores, barquito firmemente capitaneado por Ana Zamora, nos invita a sumergirnos en los autores fundamentales de nuestro Renacimiento teatral: el propio Enzina, Lucas Fernández, el teatro sacro y mucho, mucho Gil Vicente. Siempre he tenido a Torres Naharro como el principal adversario escénico del portugués y el principal autor al que la Nao le debía una puesta en escena. Pues bien, han cumplido, y lo han hecho magníficamente.
La función resulta un juguete encantador en el que el espectador disfruta de una ingeniosa trama dispuesta por un maestro de nuestras tablas (el primer preceptista europeo en lengua vernácula) con un elenco apropiado, unos preciosos figurinismo y escenografía inspirados en pinturas de Arcimboldo, una serie de composiciones musicales de primera que se deben a la dirección musical de Alicia Lázaro, la otra pata de la Nao. Destacamos, entre otros, el precioso "Romance del rey don Bermudo".
El planteamiento escénico parte de la íntima relación entre los movimientos culturales entre España e Italia en el Renacimiento: commedia dell´arte, cuentan incluso con un asesor en estos terrenos, Fabio Mangolini, manierismo, situaciones del commediaall´improviso y de comedia erudita.
Uno de los principales valores de la obra es la inclusión de todos los personajes importantes con un número limitado de actores y músicos (Silvia Acosta, María Besant, Javier Carramiñana, Juan Messeguer, Belén Nieto, Alejandro Saá, María Alejandra Saturno, Isabel Zamora) que tienen que desdoblarse o triplicarse. Algunas de las escenas más francamente divertidas de la obra (la de los médicos, las de los hortelanos) salen precisamente del juego de dobletes (y tripletes) actorales, que hacen un ejercicio rayano al virtuosismo.
Una magnífica versión. Vayan a verla: la Comedia Aquilana resulta divertida, inteligente, lúdica, y, sobre todo, bella, muy bella
La coreografía de Javier García Ávila está muy bien trabajada y dota de una gran precisión escénica a la situación de los actores en los planos de representación. La iluminación del maestro Miguel Ángel Camacho funciona como subrayado del espacio escénico y transmite cálidas sensaciones actorales. La escenografía de Ricardo Vergne presenta un palio tradicional con tres cortinas de fondo (elemento escénico que se usaría en la época) en las que se representan respectivamente el frontispicio de la edición prínceps de la Propalladia (colección de obras completas de Torres) junto a la tipografía de la edición de Andrés de Burgos de 1545 (similares a las de mi portal de autor en la Biblioteca Cervantes Virtual), y unas bellas estampas laterales con motivos de Arcimboldo con diseño de estampación deIván San Martín. Estos diseños se funden con los figurines y atrezzo de Paco Cuero, Deborah Macías y Henar Montoya en un juego de trompe l´œil típico de los frescos renacentistas.
Es, en breve, una magnífica versión. Vayan a verla: la Comedia Aquilana resulta divertida, inteligente, lúdica, y, sobre todo, bella, muy bella.
Las redes sociales, en tanto frenéticos espacios para la información y el desahogo, se han encargado de elaborar desde sus orígenes, a través de sus incesantes habituales, hombres y mujeres con ganas de recibir atención y crédito a cualquier precio, caricaturas tan interesantes como desacertadas de todo tipo de personas y actitudes: el carácter prostibulario del bienquedismo digital no sería tan terrible si simplemente se quedase en eso, en un juego estúpido en el que unas personas intentan impresionarse mutuamente para sentirse más a gusto consigo mismas.
Esta situación alcanza la categoría de problema cuando fuera de esos debates alguien recoge torpemente el guante estéril del cacareo online, cuando alguien toma acríticamente y desplaza hacia lo práctico cualquiera de los cientos de miles de guantes que pululan de un lado para otro como mosquitos precedidos por almohadillas en las pantallas de teléfonos móviles y ordenadores. Ejemplos de este desplazamiento a lo práctico se van desarrollando cada vez con mayor solidez y lozanía, retirándose así obras de museos, de exposiciones, secuestrando libros o directamente evitando su publicación, haciendo boicots a películas, etc., sometiendo todo tipo de creaciones, en definitiva, a restricciones morales que se aplican, incluso, con carácter retroactivo y, por tanto, anacrónico.
¿Cómo se recibiría hoy la canción 'Rape me' de Nirvana (Rape me, rape me my friend /Viólame, viólame amigo)? ¿Llegaría alguien a pensar que Kurt Cobain estaría a favor de las violaciones, que sería un apologeta de la violación?
¿Cómo se recibiría hoy la canción 'Rape me' de Nirvana, cuya letra comienza: Rape me, rape me my friend / rape me, rape me again (Viólame, viólame amigo / viólame, viólame otra vez)? ¿Estaría dispuesta la sociedad de hoy, tan así tenida por concienciada y libre y moderna en sus pensamientos y comportamientos, a tolerar que Kurt Cobain se pasease por los escenarios de todo el mundo cantando esta y otras letras de dudosa corrección política? ¿Llegaría alguien a pensar que Kurt Cobain estaría a favor de las violaciones, que sería un apologeta de la violación? Por supuesto que sí. No cabe duda de que el modélico estamento bien pensante (en el que caben, curiosamente, sujetos de todo el espectro ideológico) se mostraría ansioso de encabezar una vez más la magnética apetencia que genera la práctica de la censura: la gente siempre se escandaliza ante lo que no sabe interpretar.
No hace mucho, en Italia, se cambió el final de la ópera Carmenpara satisfacer demandas que no tienen nada que ver con el arte. Ya les tenía que parecer poco interesante que una obra del siglo XIX tuviese como protagonista a una mujer, que no sólo es mujer, sino que además es gitana y libre en sus afectos, como para tener que transformar su desenlace para que así los desorientados políticos de turno, que son mayoría, y las personas antiartísticas, que son aún más mayoría, se sientan satisfechas con semejante torpeza e intromisión, en lo que no deja de ser un acto que va directamente contra la cultura y no a su favor.
Muchas personas hacen de la ignorancia algo llamado sensibilidad y que no deja de ser una excusa para poder abrir la boca cuando no se tiene nada que aportar
Cuando las personas que carecen de un cierto conocimiento intentan interpretar procesos o hechos que implican un necesario despliegue de competencias que les resultan lejanas por los motivos que fueren, siempre fallarán. Aunque lo grave de la situación, realmente, es que dichas personas incompetentes (todos somos incompetentes en muchas materias y esto no es vergonzoso, porque no se puede saber todo) ya no se toman la molestia de esconder su ignorancia e intentar llenar sus vacíos con lecturas y reflexiones críticas, sino que hacen de ella, de la ignorancia misma, algo llamado sensibilidad, que no deja de ser una excusa para poder abrir la boca cuando no se tiene nada que aportar.
Se podrían poner sobre la mesa infinidad de ejemplos que retraten la impericia caricaturesca de ese nido de termitas chillonas que son las redes sociales y sus hermanos mayores, los diarios y publicaciones de periodicidad variable que, cada vez más, incluyen en sus líneas editoriales y demás contenidos la pretendida sensibilidad de la ignorancia como reclamo seductor, y que no es otra cosa que un simple y extenso atrapamoscas impregnado de saturada información.
Presentación WMagazín. "La naturaleza tiene formas astutas para encontrar nuestro punto más débil". La historia de amor de Elio y Oliver que ha conmovido este año en el cine nació en una novela publicada en 2007 por André Aciman con el mismo título: Llámame por tu nombre (Alfaguara). Diez años después llegó a las pantallas y es candidata a cuatro premios Oscar, entre ellos Mejor Película, Guión Adaptado (a cargo de James Yvory), Actor (Timothée Chalamet) y Canción. Es una historia de aprendizaje sobre el descubrimiento de los sentimientos, la seducción, la lujuria y el amor juvenil, entre un muchacho de 17 años y un adulto de casi 30, durante un verano en Italia.
La delicada novela de André Aciman, nacido en Alejandría en 1951, pero que vivió parte de su adolescencia en Italia y luego en Estados Unidos, ha obtenido premios como el Lambda Literary Award, mejor Libro del Año según The Washington Post y Publishers Weekly. Aciman dirige en la Universidad de Nueva York el Writer's Institute. Antes había sido profesor de Literatura comparada y creativa del Bard College y la Universidad de Princeton. Es autor de cuatro novelas, un volumen de cuentos, cuatro ensayos y del libro de memorias La huida de Egipto con el cual empezó su carrera literaria en 1995.
Aciman ha dicho que la adaptación cinematográfica de Llámame por tu nombre le ha encantado. La dirección es de Luca Guadagnino y el guión de James Yvory, que en 1987 dirigió también un clásico de amor homosexual: Maurice, basada en la novela homonima de E. M. Forster.
Sobre el tratamiento del amor y la lujuria en la novela, Aciman, dijo en una entrevista a Longreads: "Es mucho más fácil escribir sobre el amor joven y la lujuria joven que sobre la lujuria de mediana edad. (...) A todos les gusta la gente joven, el momento juvenil. En cambio los amores de mediana edad son, digamos, la política del asunto, no la lujuria real. Quiero decir, tenemos lujuria, pero no es lo mismo que la lujuria y el amor juvenil ni del enamoramiento joven. Por otro lado, si pienso en todas las pasiones que he tenido en mi vida, algunas sucedieron cuando tenía 12 años, luego cuando tenía 15, 16, 22, 23. Pero, entonces, comenzaron a declinar, porque ya sabes de qué se trata. Ya sabes y ves a dónde va. Tú sabes lo que la otra persona va a decir. Incluso puedes escribirlo para ellos porque eres mejor escritor que orador".
En cuanto a él como autor y la escritura de la novela explicó:
"Todos pensamos que un escritor es consecuente. Pero nadie es siempre lo que es. Tenemos al menos nueve yoes y ni siquiera hablamos con algunos de ellos. Al final del día, cuando eres escritor, tienes una familia, tienes amigos, tienes personas con las que hablas por teléfono, y luego llega un momento en el que te retiras y entras en tu pequeño cobertizo o despacho, sea lo que sea, y aquí es donde escribes, aquí es donde realmente creas cosas nuevas. No tienes idea de lo que va a salir, pero quieres seguirlo.
Y a veces te emociona seguirlo: 'Dios mío, Dios mío, estoy escribiendo una historia de sexo gay y ¿qué sé sobre el sexo gay?' ¡No sabía nada! Así que estoy escribiendo al respecto, y luego tengo la escena con el melocotón [una escena en Llámame por tu nombre que es a la vez muy tierno y muyobsceno]. Ahora, ¿hablas en serio? ¿He hecho algo así alguna vez? ¡Nunca! ¿Podría? ¡Nunca!¿Bueno?
Pero sigues con esto, y luego tienes dudas: '¿Un melocotón? ¿De verdad?'. Pero luego te dices a ti mismo: 'No, tiene que quedarse'. No porque se me haya ocurrido, porque la mitad de las cosas que se me suceden se apagan, sino porque había algo implacablemente real en esa escena y yo la quería allí. Dice algo sobre los personajes".
"¡Luego!" Una palabra, una expresión, una actitud.
Nunca había escuchado a nadie utilizar "luego" para despedirse. Me resultó arisco, seco y despectivo, dicho con la velada indiferencia de alguien a quien le daría igual no volver a verte o no saber nada de ti.
Es el primer recuerdo que tengo de él y aún hoy puedo oírlo. "¡Luego!"
Cierro los ojos, pronuncio la palabra y vuelvo a estar en la Italia de hace tantos años, caminando por la acera arbolada y viéndole salir del taxi con una camisa azulada de estampado ondulado, con los cuellos bien abiertos, las gafas de sol, un gorro de paja y mucha piel a la vista. De repente me da la mano, me entrega su mochila, saca el equipaje del maletero del taxi y me pregunta si mi padre está en casa.
Puede que todo comenzase precisamente allí y en aquel instante: la camisa, las mangas remangadas, los pulpejos redondeados de su talón que se escapan de las alpargatas desgastadas, ansiosos por probar la cálida gravilla del camino que lleva a nuestra casa y preguntando con cada zancada por dónde se va a la playa.
El huésped de este verano. Otro pelmazo.
Entonces, casi sin mediación y ya de espaldas al coche, agita el envés de la mano que le queda libre y suelta un despreocupado «¡luego!» a otro pasajero que había en el coche, con quien probablemente había compartido el pago de la carrera desde la estación. Ni siquiera dijo un nombre o hizo una bromilla para suavizar la abrupta despedida. Nada. Le despachó con una palabra: brusca, audaz y franca. No había forma de que le hubiese podido molestar.
Observa, pensé yo, así es como se despedirá de nosotros cuando llegue el momento. Con un brusco y chapucero "¡luego!".
Mientras tanto, tendremos que soportarle durante seis largas semanas.
Estaba francamente intimidado. Era uno de los inaccesibles.
Bueno, podría intentar que me gustase. Desde su barbilla redondeada hasta sus pulidos talones. Y después, tras unos días, aprendería a odiarle.
Esta era la misma persona cuya foto de la solicitud había resaltado meses antes como promesa de unas afinidades instantáneas conmigo.
Acoger a huéspedes durante el verano era la manera que tenían mis padres de ayudar a profesores universitarios jóvenes a revisar un manuscrito antes de su publicación. Todos los veranos durante seis semanas debía dejar libre mi habitación y mudarme a un cuarto del pasillo mucho más pequeño y que había sido de mi abuelo. En los meses de invierno, cuando estábamos en la ciudad, se transformaba en un cobertizo, almacén y ático a tiempo parcial, donde se rumorea que mi abuelo, mi tocayo, aún rechina sus dientes en su sueño eterno. Los residentes estivales no tenían que pagar nada, se les otorgaba un uso libre de toda la casa y podían hacer básicamente lo que les apeteciese siempre y cuando dedicasen más o menos una hora al día a ayudar a mis padres con la correspondencia y papeleos varios. Se convertían en parte de la familia y, después de unos quince años haciendo esto, nos habíamos acostumbrado a recibir una tonelada de postales y regalos, no solo en Navidad, sino todo el año, de gente que estaba en deuda emocional con mi familia y que solía desviar sus itinerarios cuando venía a Europa para pasarse por B. durante un día o dos con sus familias y darse un paseo nostálgico por sus antiguos refugios.
Era común que durante las comidas hubiese dos o tres invitados más, unas veces familiares o vecinos, otras compañeros de clase, abogados, médicos, personas ricas y famosas que se acercaban a ver a mi padre de camino a sus casas de verano. En ocasiones, incluso abríamos nuestro comedor a parejas de turistas ocasionales que habían oído hablar de la vieja casa de campo y simplemente deseaban pasarse por allí a echarle una ojeada y se quedaban encantados cuando les invitábamos a comer y les pedíamos que nos contasen algo de su vida, mientras que Mafalda, a la que se informaba en el último momento, cocinaba su especialidad más novedosa. A mi padre, reservado y tímido en privado, lo que más le gustaba era rodearse de valiosos expertos en cualquier campo para mantener largas conversaciones en varios idiomas, mientras el caluroso sol estival y unas cuantas copas de rosatello daban entrada a la tarde con su inevitable letargo. Denominábamos a ese cometido la labor del almuerzo y, al poco tiempo, también se unían a él la mayoría de nuestros invitados de seis semanas.
Quizá todo comenzase poco después de su llegada, durante una de aquellas comidas tremendas, cuando se sentó junto a mí y me di cuenta de que, aparte de un ligero bronceado conseguido durante su breve estancia en Sicilia a comienzos de aquel verano, el color de las palmas de sus manos era igual de pálido que la suave piel de las plantas de los pies, la del cuello o la del envés de sus antebrazos, que no habían estado expuestas tanto al sol. Lucían casi de un rosa claro, tan brillante y suave como la parte inferior del estómago de un lagarto. Íntimo, casto, implume, como el rubor en la cara de un atleta o el atisbo de la aurora en una noche tormentosa. Me dijo cosas sobre él que nunca hubiese sabido cómo preguntar.
Puede que comenzase durante aquellas interminables horas después de comer cuando todo el mundo holgazaneaba en traje de baño por la casa, cuerpos espatarrados en cualquier lugar matando el tiempo hasta que alguien sugería ir a las rocas a darse un baño. Los parientes, primos, vecinos, amigos, amigos de amigos, colegas, o básicamente cualquiera al que le apeteciese llamar a nuestra puerta para pedir que le dejásemos utilizar nuestra cancha de tenis, todo el mundo era bienvenido a gandulear, nadar o comer y, si permanecían el tiempo suficiente, a utilizar la casa de invitados.
O quizá comenzó en la playa. O en la cancha de tenis. O durante nuestro primer paseo juntos el primer día que estuvo aquí cuando me pidieron que le enseñase la casa y los alrededores y, una cosa llevó a la otra, me las arreglé para llevarle más allá de las viejísimas puertas de hierro forjado y llegamos hasta el interminable solar vacío que llevaba hacia las vías del tren abandonadas que solían conectar B. con N.
—¿Hay alguna estación abandonada en algún lugar? —me preguntó mientras observaba entre los árboles bajo un sol abrasador, con la intención probable de formular una consulta típica que se debe hacer al hijo del dueño.
—No, nunca hubo una estación. El tren simplemente paraba cuando se le solicitaba.
Le llamaba la atención el tren; las vías parecían muy estrechas. Había gitanos que vivían en ellas ahora. Llevan habitando ahí desde que mi madre venía a veranear aquí cuando era niña. Los gitanos han transportado dos vagones descarrilados más hacia el interior. ¿Quería ir a verlo?
—Quizá luego.
Una indiferencia educada, como si se hubiese percatado de mi inoportuno entusiasmo por darle coba y se estuviese alejando de mí sumariamente.
Me dolió.
En lugar de eso me dijo que quería abrirse una cuenta en uno de los bancos de B. y luego hacer una visita a la traductora al italiano a quien su editor en Italia había adjudicado su libro.
Decidí llevarle allí en bici.
La conversación sobre ruedas no mejoraba la que habíamos tenido a pie. Por el camino paramos a por algo para beber. La bartabaccheria estaba completamente a oscuras y vacía. El dueño fregaba el suelo con un fuerte producto a base de amoniaco. Salimos de allí a toda velocidad. Un solitario mirlo que descansaba sobre un pino mediterráneo entonaba unas pocas notas que se perdían inmediatamente entre el zumbido de las cigarras.
Le di un buen trago a la botella grande de agua con gas, se la pasé y luego volví a beber. Me eché un poco en la mano y me froté con ella la cara, pasándome los dedos por el pelo. El líquido no estaba lo suficientemente frío ni tenía mucho gas, por lo que dejaba una sensación de sed mal aplacada.
¿Qué se podía hacer por allí?
Nada. Esperar a que acabase el verano.
Y entonces, ¿qué se hacía en invierno?
Sonreí al pensar en la respuesta que estaba a punto de darle. Él lo pilló al vuelo y dijo: "No me lo digas: esperar a que llegue el verano, ¿a que sí?".
Este artículo se publicó originalmente en la web de WMagazín, la revista literaria online dirigida por el periodista Winston Manrique Sabogal, un espacio para conversar con sosiego sobre literatura, donde él es cronista de encuentros, reportajes y entrevistas a ambos lados del Atlántico, y los lectores son los coautores, con sus lecturas y comentarios
El concursante Miquel Fernández ha sido el ganador de la sexta edición de Tu Cara Me Suena. El programa de Antena 3 ha celebrado este viernes la final en la que el actor se ha proclamado vencedor imitando a Pablo López frente a sus compañeros Lucía Gil, que imitó a Bonnie Tyler y que quedó en segundo lugar, y Fran Dieli, que hizo de Michael Jackson y quedó tercero.
Diana Navarro (Antonio Molina), Raúl Pérez (Toni Zenet) y Pepa Aniorte (Efecto Mariposa), los otros tres finalistas, fueron eliminados en la primera ronda.
Miquel Fernández decidió compartir el premio de 30.000 euros destinados a ser donados a quien el ganador elija con todas las asociaciones de sus compañeros. Este es el momento en el que se conoce al ganador del concurso:
El actor ganó con una imitación de Pablo López y la canción El patio. Aquí puedes ver la actuación completa:
Aquí está la canción y actuación original, para que puedas comparar:
Desde el principio de la gala, todos los participantes recibieron muchos mensajes de ánimo en redes sociales y algunos tuiteros incluso proclamaron sus apuestas.
Pegadita al sofá para ver la final de @TuCaraMSuena en @antena3com Sabéis quién es mi ganador, verdad? Lo dije en la primera gala. El señor @Miquelfergarcia , que se ha marcado un pedazo de temporada. A ver si acierto... Apuestas? #TCMSFinal
Todo el mundo tiene camisetas en su armario. Son cómodas, pueden ser más casual o más elegantes y nunca pasan de moda. Pero ahora resulta que también se pueden convertir en accesorios originales que de verdad te pondrás.
Si tienes una pila de camisetas amontonadas en casa, ¿por qué no pruebas a transformarlas en algo nuevo? Sólo en el año 2014, los estadounidenses produjeron 16 millones de toneladas de residuos textiles, de acuerdo con la Agencia de Protección del Medio Ambiente de EE UU. Si reutilizas tus camisetas, evitarás que acaben en el vertedero y tendrás un nuevo accesorio para tu colección sin necesidad de gastarte un céntimo. Todos ganamos.
Para inspirarte, aquí van seis ideas para transformar tus camisetas viejas en complementos:
1. Una bonita diadema
Solo necesitas una camiseta vieja, pintura dorada, un lápiz con una goma de borrar que no utilices y tijeras o un cúter. Corta una tira de tela de tu camiseta de unos 10 o 12 centímetros de largo, píntala haciendo topos dorados con ayuda de la goma de borrar y deja que se seque la pintura. Dobla la diadema en forma de turbante como más te guste. Aquí encontrarás algunas fotos con ideas para darle forma a tu diadema.
2. Un collar con varios hilos
Además de un par de camisetas viejas, para hacer este collar necesitarás alguna pieza de bisutería que encontrarás fácilmente en tiendas de manualidades, como tubos de cobre, una cadena, anillos... El collar se puede diseñar de formas muy distintas; aquí tienes varias ideas.
3. Un coletero
Hay ocasiones en las que el pelo largo es un incordio, como por ejemplo en el gimnasio. Este coletero puede ser la solución. Los ingredientes para confeccionarlo son una camiseta vieja, unas tijeras y cinta adhesiva. Sigue los pasos indicados en la imagen y tu coletero estará listo en menos de 30 minutos.
4. Un collar con un toque moderno
Este collar está hecho con una cadena fina y con un tubito de cobre en el centro para darle un toque más moderno. Es otra idea para hacer un collar, de las muchas que puedes encontrar en Brit+Co.
5. Un coletero trenzado
Este precioso coletero también puede servir como pulsera. Para elaborarlo necesitarás una camiseta vieja, unas tijeras y algo para hacer un agujero. Corta dos tiras de la camiseta, ten en cuenta que cuanto más larga sea, más grueso será tu coletero. Corta uno de los bordes de cada tira, une ambas, anúdalas y ve trenzándolas hasta terminar. Puedes apoyarte en estas fotos para hacerlo correctamente.
6. Una bufanda de dos colores
Este pañuelo trenzado añadirá una pizca de color a tu outfit de invierno. Para este original accesorio solo tienes que conseguir dos camisetas de distintos colores, aguja e hilo y unas tijeras. En este vídeo puedes ver cómo anudarlo:
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por María Ginés Grao.
Concretamente, una imagen de infancia, donde lo vemos de niño, sentado en plena calle, con pantalón corto y camiseta, junto a un perrillo que juega a su lado.